Excelente experiencia , buena atención buen vuelo , nada que decir todo el mundo muy amable.
Me Encantó el servicio, el personal muy amable. Lo recomiendo
El embarque lento, la tripulación atenta, la comida muy buena, poca agua. La pantalla de entretenimiento se caía
Excelente experiencia. Butacas espaciosas, muy buena comida, la mejor predisposición de la tripulación. Muy bueno el entretenimiento a bordo. En resumen, de las mejores experiencias de vuelo
Pedí un menú vegetariano por cuestiones gástricas y la verdad es que me tocaron comidas muy picantes.
Por una cuestión gástrica pedí menú vegetariano aunque no lo disfruté. Estaba realmente muy picante y la verdad que es la primera vez que me pasa.
Toda la experiencia del abordaje, el avión, el servicio es impecable. Me tocó un avión que no tenía pantalla pero el vuelo fue rápido, así que no me aburrí. Llegamos al destino con tiempo de anticipación.
Mala, en el sentido de que me cobraron extra equipaje, del cual ya tenía incluido en mi vuelo, razón por la cual no debí realizar ese gasto al ya tener contemplado ese beneficio
Puntual pero los alimentos muy malos en variedad, sabor, cantidad y aspecto
No servía la app, no servían las televisiones, el personal nada cortés
Llevaba un bolso pequeño y compré unas galletas en el aeropuerto y no me dejaron subir con esos 3 bultos (mi maleta de mano incluida). Tuve que meter mi bolso y lo que contenía en la bolsa donde venían las galletas
No respetaron las zonas y en el vuelo apagaron el aire acondicionado
Genial excelente precio desde el aeropuerto del Bajío y alimentos.
La limpieza del asiento no era la ideal, había un chicle pegado en mi asiento
Regular, toda vez que llego con una hora de atraso
Llego tarde mi vuelo y algo que si valoro que tuvieron el interés de buscar que tomara un vuelo antes para mi conexión a Colombia
Lufthansa, como prácticamente todas las compañías aéreas, abusan de sus clientes lo que les da la gana sin restricciones. Como al volar siento cierta ansiedad además de pagar el ticket normal tengo que pagar un sobreprecio al comprar los asientos y resulta que luego Lufthansa a pesar de haberme cobrado por esos asientos me los cambia a su voluntad lo que prácticamente supone una estafa. En mi último vuelo es lo que hizo y por ello mi vuelo fue nefasto. Estamos en unos tiempos en que los abusos están a la orden del día y parece ser que nadie tiene la intención de pararlos.
Como tantas veces este año, retrasos y mal servicio. Además maleta perdida. Lufthansa ha pasado de ser la mejor a una compañía mediocre