Por qué ir
La ciudad de Guadalajara, en el estado de Jalisco, es la máxima representante de dos grandes íconos de México: el tequila y los mariachis. La tradición se une con la modernidad, creando un destino para todos los bolsillos, que atrae a turistas durante todo el año. Un imperdible: súbete al José Cuervo Express y viaja a Tequila para concer la historia de su famosa bebida. Si después de recorrer los puntos más importantes de Guadalajara, como sus museos, monumentos y edificios, te quedan algunos días de vacaciones, adéntrate en el lado menos conocido de la ciudad. Por ejemplo, puedes visitar la mansión Clover Lawn, un curioso edificio de arquitectura victoriana, que sirve de escenario para exposiciones, eventos, fiestas privadas y mucho más.A las afuera de Guadalajara puedes encontrarte con la naturaleza en la Barranca de Huentitán, donde está el puente colgante de Arcediano, el más viejo de México y el segundo más antiguo de todo el continente americano. Y como ocurre a lo largo de todo el país, Guadalajara también cuenta con ruinas arqueológicas, vestigio de las culturas prehispánicas. Aquí se encuentra Ixtépete, con antiguos templos similares a los aztecas y que podrían estar relacionados con los de Teotihuacán.